La adaptación en el Jardín Maternal

Hoy comienza una nueva etapa en la vida de tu hijo, el ingreso a un lugar donde recibirá: amor, contención, cuidado, formación entre otras cosas. Este lugar es: “El Jardín Maternal”.

Nuestro objetivo institucional planteado es atender sus necesidades biopsicosociales, en búsqueda del desarrollo integral de su personalidad, proporcionándole las condiciones afectivas, asistenciales y ambientales adecuadas.

Realmente éste es un día muy especial para el niño y toda su familia, el ingreso al Jardín Maternal es el primer paso del niño en el camino de su socialización, que durará toda su vida. Es el pasaje de lo familiar a lo institucional, por lo tanto marca un hito tanto para el niño (que comenzará a relacionarse fuera del núcleo de su familia), como para sus padres, que dejarán también en manos de otros la educación y el cuidado de su hijo.

En el Jardín Maternal, el niño encontrará un lugar nuevo y diferente, un lugar repleto de cosas divertidas. Aprenderá a relacionarse con sus pares, con quienes compartirá actividades y juguetes.

Una amable señorita jugará y cuidará de él constituyéndose en sustituto materno durante la ausencia de la madre. Todo allí está pensado para estimular su desarrollo y acompañar su crecimiento, favoreciendo el intercambio con otros niños y maestros.

Este esperado comienzo implica además un “gran desafío”, ya que el pequeño deberá permanecer algunas horas separado de su madre, en un lugar desconocido para él, con otros pequeños de su edad, con sus mismas necesidades e inquietudes.

Pero no sólo para los niños, también para los papás ese momento es muy importante, ya que para ellos dejar a su pequeño en el Jardín Maternal, también constituye “un desafío”, pues esta separación implica un “corte” con sus hijos, que permanecerán cierto tiempo fuera del ámbito familiar.

Al iniciar esta nueva etapa, y para que se dé un buen comienzo, será muy importante que los papás acompañen al niño en su adaptación. Esto permitirá que tanto los padres como los niños se familiaricen con el lugar y conozcan la modalidad de trabajo de la institución. Esto es muy importante para que el pequeño pueda ir acostumbrándose de a poco a esa nueva situación y para que también los padres puedan sentirse seguros y confiados del lugar donde concurrirá el niño, trasmitiendo estos sentimientos a sus hijos para que luego ellos puedan permanecer sin su compañía, disfrutando y aprendiendo durante su estadía en el Jardín Maternal.

Los maestros guiarán este período de adaptación, pero será fundamental la actitud y la disposición de los padres para que este tiempo de adaptación sea exitoso. No todos los padres ni todos los niños viven este tiempo de adaptación de igual manera, éste será diferente en cada chico y dependerá de diversos factores, pero estará básicamente relacionado con la manera en que los padres vivencien este momento de despegue.

Para algunos padres ésta podrá ser la primera separación de sus hijos, para otros, tal vez más acostumbrados a permanecer cierto tiempo fuera de la casa, será un poco más sencillo, pero para todos será el primer paso del niño en el camino de si institucionalización, por lo tanto será un momento muy especial y movilizador que puede ser vivido con ansiedades y algunas angustias.

El despegue del niño de su mamá deberá ser progresivo pero el momento de la separación deberá ser vivido con seguridad y firmeza, sólo así el niño se sentirá confiado y seguro de que éste será un buen lugar para él.

Si las ansiedades o angustias de los padres no son desmedidas, todo saldrá de manera esperable y en un cierto tiempo el niño estará perfectamente adaptado a este nuevo medio disfrutando de la compañía de su maestra y de sus compañeros.

De no ser así, en el posible caso de que alguno presente dificultades, o de que este tiempo de adaptación se prolongue más de lo esperado, es importante tener en cuenta la posibilidad de que el niño se encuentre atravesando por un momento especial (nacimiento de un hermano, mudanza o alguna problemática familiar) que pudiera entorpecer el proceso de adaptación

¿Cómo pueden los padres acompañar a sus hijos en este momento?

En principio, será importante que los padres estén dispuestos a participar y colaborar en su educación, ya que éste es un trabajo conjunto entre ellos y los docentes.

Deberán estar abiertos a la comunicación y el intercambio con la institución, y de esta manera estar al tanto de los distintos acontecimientos, así como preguntar o hablar de sus preocupaciones o temores. Respetar la organización propuesta por el Jardín Maternal, para que también el niño se acomode a los ritmos y horarios.

Y lo más importante: propiciar la separación de nuestros hijos para que puedan crecer seguros y felices, creando nuevos vínculos por fuera del núcleo familiar.

La mejor manera de acompañar a los hijos en este camino que se inicia y facilitar su adaptación a lo nuevo, es ofreciéndoles nuestra presencia, nuestra confianza, pero básicamente nuestra seguridad y firmeza.